La magnificat es una oración de la Virgen María, en la que exaltó el poder de Dios y sus milagros, después de haber quedado embarazada por obra y gracia del Espíritu Santo.
El mensaje de María fue durante una visita que realizó a su prima Isabel, la cual también estaba preñada por primera vez de San Juan Bautista.
María era humilde y creyente del señor, en este sentido, la magnificat se traduce como una petición de perdón, protección y amor para los hombres donde ella intercede ante el todopoderoso.
Hoy en día es conocida como una buena oración al despertar.
Conoce cómo fue el encuentro entre la Virgen María e Isabel
Hablar de la Virgen María es sinónimo de esperanza para muchos peregrinos, en medio de los problemas que hoy en día aquejan a la tierra.
De hecho, la promesa de un mundo mejor se mantiene de pie a través de los relatos bíblicos, prueba de ello fue el encuentro entre la Virgen María y su prima Isabel.
En este sentido, la visita se llevó a cabo en las montañas de Judá, donde se hallaba Isabel, que durante su juventud no pudo concebir.
Sin embargo, Isabel ya mayor salió embarazada por obra y gracia del Espíritu Santo, al igual que María que en ese momento se encontraba en estado.
Isabel: “tú eres bendita entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre”
La Virgen María fue recibida por su prima Isabel con estas palabras: “tú eres bendita entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre”.
Asimismo, manifestó estar alegre por la Virgen María y que creyera sobre lo anunciado por Dios con relación a la llegada de Jesucristo al mundo.